Los equipos de rescate y unidades caninas continuaron este miércoles con urgencia las tareas de búsqueda entre los escombros, ante los pronósticos de un frente frío con fuertes lluvias, y en lo que el primer ministro calificó como una «carrera contrarreloj«, después de que potentes terremotos en el oeste de Japón dejaran al menos 64 muertos en los últimos días. Se cree que hay decenas de personas atrapadas bajo edificios derrumbados.
La prefectura de Ishikawa y áreas cercanas fueron sacudidas por una réplica de magnitud 4,9 la madrugada del miércoles, en una de las decenas de temblores que siguieron al sísmo de magnitud 7,6 del lunes con epicentro en Noto, en la prefectura de Ishikawa, a unos 300 kilómetros de Tokio en la costa opuesta. El terremoto provocó alertas de tsunami, seguido de olas que midieron más de 1 metro en algunos lugares.
Según los expertos, las primeras 72 horas son especialmente críticas, dado que las perspectivas de supervivencia disminuyen considerablemente después de tres días. “Han pasado más de 40 horas. Esta es una carrera contrarreloj y creo que estamos en un momento crítico”, dijo a los periodistas el primer ministro japonés, Fumio Kishida. «Hemos recibido informaciones de que muchas personas siguen esperando ser rescatadas bajo los edificios derrumbados».
La superficie estrecha de la península de Noto añade más obstáculos a los desafíos para llegar hasta algunas comunidades. Los servicios de agua, electricidad y telefonía móvil seguían cortados en algunas zonas. Los equipos de emergencia repartieron agua, mantas, alimentos y otros suministros. Los perros de búsqueda se unieron al personal militar y a los bomberos que intentaban encontrar y rescatar a decenas de personas que siguen atrapadas, aunque el número exacto no está claro.
El desastre natural ha dejado más de 30.000 desplazados de casi una veintena de localidades en la prefectura de Ishikawa, la más golpeada por el terremoto. Los pronósticos meteorológicos, que vaticinan fuertes lluvias en Ishikawa, añaden preocupaciones ante posibles deslizamientos de tierra y mayores daños a casas parcialmente derrumbadas.
El fallo eléctrico parcial en una central nuclear, sin consecuencias
Como un país propenso a los terremotos, con fallas activas y numerosos volcanes, Japón ha sufrido importantes desastres, incluido un terremoto, un tsunami y un desastre nuclear en el noreste de Japón en 2011. El de esta semana es el terremoto más devastadordesde el de 2016 en la prefectura de Kumamoto, que causó más de 200 muertos.
Varias plantas nucleares de la región generaron preocupación, aunque no se ha informado de problemas importantes ni aumentos en los niveles de radiación. La planta nuclear de Shika en Ishikawa sufrió un fallo eléctrico parcial, pero se activó el suministro energético de apoyo, lo que garantizó el mantenimiento del proceso de enfriamiento esencial para el buen funcionamiento de la central.
Tomado de Euronews – Foto: Euronews