Breves apuntes sobre el Carnaval

El carnaval es una fiesta pagana-cristiana, cuyos orígenes se remontan a los pueblos antiguos (sumerios, egipcios, griegos y romanos) es decir es una fiesta que conecta a los seres humanos con su pasado. En el Ecuador y en varios países de América se produce un sincretismo con las fiestas andinas. En el mundo inca hay 4 raimes dos masculinos y dos femeninos, el Pawkar Raymi es el primer Raymi femenino y corresponde al equinoccio de marzo, en el mismo se producían ceremonias de agradecimiento por los granos tiernos, las flores y los frutos de la cosecha. En nuestra realidad contemporánea se produce un sincretismo entre los mundos que nos constituyen. En nuestra realidad más antigua se conmemoraba el Mushuk Nina, fiesta del fuego nuevo en el inicio el año andino.

Del latín carnevale que significa la “adiós de la carne”; carne que no se comerá desde lo gastronómico o sexual, en los siguientes 40 días de la cuaresma cristiana, antes de la pascua o día de resurrección, como un acto de constricción e imitación a Cristo que antes de enfrentar la crucifixión romana ayunó cuarenta días en el desierto, donde tuvo que enfrentar las tentaciones que le puso el diablo.

Los pueblos antiguos eran solares o lunares y eso marca la fecha de celebración de sus fiestas. El carnaval es lunar, y se vive antes de la pascua judía que recuerda la salvación de sus hijos de Israel de una de las siete plagas y su posterior huida de Egipto; y, la pascua por la resurrección de Jesucristo. Es muy simbólico que la resurrección de Jesús coincida con la pascua judía, es decir después de la primera luna llena primavera que se da en el hemisferio norte, por ello las fechas de carnaval y semana santa varían en el calendario que de año a año.

En las culturas antiguas se daban en estas fechas conmemoraciones paganas donde se exaltaba la libido y los excesos donde se comía y bebía en abundancia. En la tradición jadeo cristiana, de alguna forma se mantienen esos excesos antes del “adiós a la carne”. Hasta hace pocos años durante la cuaresma las familias ecuatorianas mantenían una actitud de abstinencia en todo sentido.

En la edad media, el carnaval significó la sobrevivencia de varias tradiciones y simbolismos paganos, las mascaradas tienen una connotación fundamental, de alguna forma el que actuaba en las fiestas de exuberancia no era quien la usaba sino la máscara que parecía asumir vida propia.

El carnaval en el Ecuador, se ha ido reinventando de muchas maneras, llegó al país con la conquista y fue fortaleciéndose en la identidad popular que no es otra cosa la forma como sienten, piensan y actúan los ecuatorianos.

Es una fiesta tradicional porque tienes sus personajes: Yaya Carnaval, Mama Shalva, Taita carnaval, danzantes, Warmi Tukushka, etc.; también tiene su música propia que gira en torno a la copla cuya chispa y erotismo a más de enamorar tiene la función de decir lo que se calla en el amor y en las relaciones de poder.

 

Cuando yo estaba en la cárcel
no me venían a ver,
ahora que ya estoy libre
dueña te quieres hacer.

 

Cuando yo era solterito
no sabía que es sufrir;
y ahora que ya soy casado
ya no puedo ni dormir.

En el amor de dos pobres
nadie nos podrá impedir;
seremos inseparables
hasta el día de morir.

En esta esquina
baila un payaso;
salí guambrita
dale un abrazo.

Eso que te digo
te digo no más;
a ver si me quieres
un poquito más.

Al ladito de mi casa
tengo una mata de arroz;
para darte de repente
cuando me case con vos.

Para arriba de esta calle
había un burro pelado;
y yo que le quedo viendo,
ha sido el burro de al lado.

Para qué pariste, madre,
un hijo tan desgraciado;
con dos pelotas al lado
y un mojigato parado.

 

Cuando yo era chiquito
no sabía que es amor;
y ahora que soy grandecito
yo soy el maistro mayor

La danza en carnaval es fundamental, distintos son los personajes que forman las comparsas y tejen la alegría.

Las comidas del carnaval giran en torno a los frutos de la tierra. En Guaranda por ejemplo los carnavaleros invadían las casas para aprovisionarse de agua. El dueño de casa los recibía con un traguito fraternal y con un plato de caldo de gallina o fritada o chigüiles. En Riobamba se comparte el jucho, bebida de carnaval.

La costumbre de jugar  con agua tal vez se pueda explicar desde el sincretismo cultural, se cree que los habitantes de los pueblos originarios ofrendaban sangre en agradecimiento a la tierra por sus frutos, de ahí costumbres como la toma de la plaza, con la llegada de los españoles en algún punto la sangre fue remplazada por el agua que purifica y fecunda a los seres.

El carnaval es un tiempo de abundancia, solidaridad y agradecimiento, tiempo que hay que disfrutar “(…) no sea que el otro año nos vayan a enterrar”.

Gabriel Cisneros Abedrabbo
17 de febrero de 2023