10 mujeres destacadas del Ecuador

Reina Pacha, monumento en Riobamba. Quincentenario del Natalicio de la Reina Pacha. Foto: Internet
Por Dr. Luis Rivadeneira Játiva
Presidente del Ateneo de Quito
Miembro Honorario del Ateneo de Chimborazo
Académico Correspondiente de la Academia Nacional de Historia
Reina Pacha Duchicela de Liribamba
Paccha Duchicela (1485-1525), fue, según el sacerdote Juan de Velasco , reina de Quito entre 1487 y 1525 y co-reinó con su esposo Huayna Cápac , emperador del Imperio inca .
Pacha, hija del Rey Cacha, llegó a ser Soberana de Quito, de los Señoríos formados por las etnias: Puruhá, Quitus-Caras, Cayambis, Imbayas y Caranquis, a la muerte de su padre, quien murió en la Batalla de Hatuntaqui.
Nació en el Palacio Capac Cocha de Liribamba en 1465 y murió en Quito siendo Reina, en 1525.
“Pacha Duchicela fue la Shyri XVI del Reino de Quito, un conjunto puruhá de etnias que habitaron las actuales provincias de Chimborazo, Bolívar, Tungurahua y parte de Cotopaxi, en la actual república del Ecuador. «La escogida» o «hermosa como la luna, majestuosa como el sol«, 1485, fue la Shyrilesa XVI”. Wikipedia.
Pacha, mujer guerrera, bella y hábil con las armas, vino a luchar en nuestras tierras, junto a los Imbayas y Caranquis, en defensa de nuestra heredad territorial. Cacha y Pacha son nativos de Liribamba, de la etnia Puruhá, pero, vivieron en nuestra tierra en la época de guerra y también en la pacificación. Algo importante, para nuestro orgullo, es que la Reina Pacha fue madre de Atahualpa, quien nació en Caranqui y heredó la cultura de su madre.
Los Reyes Cacha y Pacha, sirvieron a nuestra antigua Nación Caranqui, en su lucha contra los incas. El Rey Cacha murió, sin rendirse, con las armas en sus manos, lo cual le ha hecho inmortal.
Nuestro Rey Cacha, ha sido olvidado, al no existir en Atuntaqui un monumento de él ni de su hija Pacha, que llegó a ser Reina, ni tampoco de la Fortaleza de Hatuntaqui. El recuerdo que tenemos del Rey Cacha, es su lucha contra los incas y el Himno de nuestro Cantón Antonio Ante, que dice: “Es el alma de Cacha gigante, que no pudo ni el inca vencer”.
Este artículo se escribe en homenaje al Quincentenario del Natalicio de la Reina Pacha. Luis Rivadeneira Játiva.
Generala Manuela Sáenz

Imagen: Wix
“Manuelita Sáenz, política y militar ecuatoriana, prócer de la independencia hispanoamericana, que por sus actividades heroicas en favor de la Independencia del Imperio Español, recibió la orden peruana de “caballeresa del Sol” en 1822, por el general José de San Martín, el rango de coronel por el Congreso de la Gran Colombia por su participación en la batalla de Junín, igualmente recibió el título de Libertadora del Libertador que le otorgó Simón Bolívar al salvarle la vida durante la conspiración Septembrina en Bogotá. Sostuvo con Bolívar una épica relación sentimental, intelectual y de ideales de la campaña libertadora, donde se le atribuye la concepción de la Patria Grande. Participó también en la batalla de Ayacucho. En vida, tuvo los grados militares de Capitana y Coronel. Recibió el grado militar de Generala, pos-morten”.
En su destierro en Paita, junto a Simón Rodríguez, maestro de Bolívar, recordaba pasajes de su vida junto al Libertador: su incorporación al ejército patriota cuando descubrió que se tramaba que el Libertador se traslade al Perú y pierda el gobierno y mando y su influencia en Colombia; la corona de rosas y laureles que tejió para recibir a Simón Bolívar, el 16 de junio de 1822; su carrera militar hasta llegar a Junín, el 6 de agosto de 1824; su felicidad cuando el Mariscal Sucre informó al Libertador sobre su actuación en la Batalla de Ayacucho, el 9 de diciembre de 1824 y solicitó se le otorgue el grado de Coronel del Ejército Colombiano.
En su primer encuentro con Simón Bolívar en Quito, se enfrascaron en el análisis de citas de escritores griegos y latinos, que contribuyó en su preparación filosófica, diplomática y militar.
Por su amor a Bolívar, su valentía y vigilancia de los atentados contra su vida, el mismo Libertador le otorgó el título de: «Libertadora del Libertador».
En noviembre de 1856, el puerto de Paita es asolado por la difteria. Todos se enferman y su sirvienta muere. Pocas horas después, cierra sus ojos Manuelita Sáenz.
Las cartas, diarios y documentos históricos y políticos de Manuela Sáenz y Simón Bolívar, ocultados durante 130 años, llegaron al Museo levantado por su protector Don Carlos Álvarez, en donde reposan estos documentos.
El presidente Rafael Correa Delgado, el 22 de mayo de 2007, le concedió el grado de Generala de Honor de la República de Ecuador, post mortem.
Manuela Espejo

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“Manuela Espejo nació en Quito el 20 de diciembre de 1753. Periodista, enfermera, feminista y revolucionaria, Manuela sobresalió en una sociedad patriarcal y discriminadora. Estudió junto a sus hermanos, Eugenio y Juan, el pensamiento ilustrado, y junto a ellos proclamó los ideales independentistas. Estaba hecha para argumentar, oponerse, opinar, luchar, pero le tocó vivir un momento histórico en el que solo las voces masculinas eran escuchadas.
Escribió en el periódico Primicias de la Cultura de Quito con el seudónimo de Erophilia, desde donde abogaba por un trato igualitario a las mujeres y exigía mayor participación de la mujer en la educación universitaria, en las manifestaciones culturales y políticas. Una de sus principales preocupaciones fue la cultura. Valoraba a los artesanos, escritores y artistas. Generosa y solidaria, acompañó a su hermano Eugenio en el combate a la fiebre amarilla que asoló Quito en 1785.
Participó activamente en las reuniones que Eugenio promovía para lograr la Independencia de la Real Audiencia de Quito.
Manuela, por su condición de mujer en una sociedad que la había invisibilizado, fue mensajera, activista, conspiradora, y fue la defensora de sus hermanos cuando ellos fueron perseguidos por sus ideas.
Apasionada en sus luchas y en el amor, Manuela Espejo se casó con José Mejía Lequerica. Ella tenía cuarenta y cuatro años, él veintiuno. ¿Qué los unió? El amor, la pasión y la Independencia.
A ninguno de los dos les importó la maledicencia de la sociedad que acusaba a Manuela de vieja pervertida. Una sociedad donde la inteligencia y el placer eran pecados mortales que no se perdonaban en las mujeres, pero eran virtudes en los hombres.
Manuela Espejo logró ver el sueño de la Independencia convertido en realidad, antes de su muerte en Quito, en 1829, a los 76 años. Es considerada una de las pensadoras más importantes del continente americano y pionera del feminismo”. MANUELA ESPEJO, Lola García, octubre 2022
Matilde Hidalgo de Procel

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Por sus méritos el nombre de Matilde Hidalgo de Procel fue postulada para el evento «El mejor Ecuatoriano»
Nació en Loja, el 29 de Septiembre de 1889. Sus padres fueron: Juan Manuel Hidalgo Pauta y Carmen Navarro del Castillo. En 1895, ingresó a la Escuela La Inmaculada para cumplir su educación primaria. A su corta edad dominaba la lectura, escritura y dominaba el piano.
Posteriormente y pese a críticas machistas, Matilde se inscribió en el Colegio Bernardo Valdivieso para culminar la secundaria. Como su afición era la Medicina, al poco tiempo se trasladó a la ciudad capital para continuar sus estudios superiores en la Universidad Central del Ecuador, allí, obtuvo el título de Doctora en 1921, y se convirtió así, en la primera médica del Ecuador. Ya una profesional, Matilde Hidalgo regresa a su ciudad natal para brindar su servicio a los enfermos. Con admiración y respeto la reciben familiares, amigos y coterráneos pero al pasar unos meses, las incomprensiones, odios y envidias empezaron a tomar fuerza.
Las infames críticas le hacen tomar la dura determinación de no regresar jamás a Loja. En 1922, su rumbo fue Guayaquil, en esa ciudad consiguió trabajo en el Hospital General, no obstante, las dificultades laborales con el resto de colegas, continuaron. Un año después la reconocida médica, contrajo matrimonio con Fernando Procel Lafebre, destacado profesor de Historia, ambos se radicaron en Machala. Procreó dos hijos: Fernando Lenin y Gonzalo Enrique. En 1924 luego de vencer algunas cortapisas, logra convertirse en la primera sufragista del Ecuador y América Latina, derecho negado a la mujer durante varios años.
En 1973 un ataque de apoplejía paralizó su cuerpo y mente; nada pudieron hacer familiares y reconocidos médicos. Falleció en Guayaquil el 20 de Febrero de 1974. MATILDE HIDALGO DE PROCEL. Una Mujer Total. Jenny Estrada.
Tránsito Amagüaña

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“Mujer, indígena, analfabeta, maltratada y sumida en la pobreza, inscribe su actividad política en el sindicalismo indígena, que alcanza importante expresión al conformarse la Federación Ecuatoriana de Indios en 1944. Poco después, logra que se ponga fin al sistema de explotación doméstica de las «huasicamías y servicias» y demanda el cumplimiento del Código de Trabajo. Promueve y conforma la cooperativa agraria como uno de los mecanismos de presión social y política para exigir al Estado la entrega de tierra para los indígenas.
Rosa Elena Tránsito Amaguaña Alba fue una activista indígena ecuatoriana y referente del feminismo. Nació en 1909 en Ecuador y creció trabajando en una hacienda desde los 7 años de edad. Siguió los pasos de su madre como líder del movimiento indígena y participó en marchas reclamando tierras y derechos laborales para los indígenas. Fundó organizaciones para defender los derechos de los campesinos indígenas y promover la educación bilingüe”. Wikipedia.
Dolores Cacuango

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Dolores Cacuango Quilo, conocida como Mama Dulu (Cayambe, 26 de octubre de 1881-Yanahuayco, 23 de abril de 1971), fue una activista ecuatoriana pionera en el campo de la lucha por los derechos de los indígenas y campesinos en Ecuador.
“Hija de Andrea Quilo y Juan Cacuango, fue una activa impulsora de la fundación de escuelas bilingües en colaboración con Luisa Gómez de la Torre; en ese contexto, fundó en 1946 la primera escuela bilingüe (quichua-español). Dolores intentó convocar a más de mil cabecillas del país, para reclamar sus derechos y reducir la violencia.
En el ámbito político, en 1944 participó en la creación de la primera organización indígena en Ecuador, que se denominó Federación Ecuatoriana de Indígenas (FEI), auspiciada por el Partido Comunista del Ecuador, en dicha organización ocuparía la Secretaría General.
Además, lideró la apertura de escuelas sindicales en Cayambe; y, junto a Rpsa Lema, fue una de las mujeres de origen indígena más reconocidas en su país a fines de la década de 1940”. Wikipedia.
Lorenza Abimañay

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No aguantaba más su pueblo,
no aguantaba más su cuerpo
“Era 1803, diez mil indios se levantaron en Guamote contra las autoridades españolas. Lorenza Abimañay fue una de sus dirigentes. ¿Cuándo nació? ¿Cuántos años tenía? Nadie lo sabe, las autoridades coloniales no registraban el nacimiento de los indios. Solo los veían crecer para, cuando estuviesen con suficiente fuerza, llevarlos a sus mitas, a sus obrajes, a sus batanes, a sus casas de hacienda. La Iglesia los bautizaba y empezaba a hacer cuenta de los diezmos que deberían pagar, los ya angelitos, cuando fuesen grandes.
¿Cuántos años debe tener una mujer para ser reconocida como dirigente? ¿Cuántos años debe ver morir a sus hijos por hambre? ¿Cuántos años debe tener para ver partir a su marido a las minas? Podemos soltar números: veinte, treinta, cuarenta… Podrían ser menos. Vivir la exclusión, la discriminación, la violencia sexual, era lo común para las mujeres indias. No importaba su edad.
Imagino a una Lorenza grande, con una fuerza crecida a golpes. Con una voz profunda nacida en sus más recónditos recuerdos, en las entrañas de la tierra usurpada a sus ancestros. No aguantaba más su pueblo, no aguantaba más su cuerpo. Salió a luchar, con un palo en la mano tal vez o con un hacha. Ese día cercano al carnaval de 1803 cuando llegaron a decirles que les iban a cobrar más diezmos sobre sus animales, sobre sus chacras, sobre sus aves, sobre la leche y el queso, sobre el maíz, sobre la cebada, Lorenza salió para decir:
“¡Ya no más!” Ya no creía en las leyes, no creía en las autoridades.
Chunka waranka indios, achka ashtawan, de Alausí, Tiksan, Guamote, Columbe, de todas las haciendas levantamos, de todas las comunidades. A autoridades agarramos, ahí matamos.
Tal vez tenía la convicción que de nada serviría expulsar a las autoridades; iban a regresar porque lo que querían era la tierra y el trabajo de los indios. ¿Quién va a trabajar las tierras? ¿Quién va a servir en sus casas? ¿Quién va a dar de mamar a sus wawas? Nada iba a cambiar. ¿Iban a devolverles sus tierras? ¿Iban a dejar que usaran libremente el agua? ¿Iban a dejar que practicaran libremente sus creencias? ¿Iban a dejar que tuvieran sus propias leyes?
Blancos matando indios, cabeza cortaban y en palos ponían. Descuartizaban para poner pedazos a la entrada de pueblos. Igualito que ellos hacían hicimos nosotros. Yo, ca, les saqué los ojos y me comí. Para que no nos espíen más. Para que no vean lo poco que nos queda y quieran llevar. Para que no busquen más.
Lorenza, arrastrada por un burro, fue llevada a la plaza de Riobamba para ser ejecutada. Sabía que la ahorcarían, que le cortarían la cabeza, las piernas y los brazos. No tenía miedo, tal vez pensaba: ellos me van a matar, pero ellos son pocos, los indios somos muchos. Hemos de poder vencerles un día.
1803, 1903, 2000, 2022. Un día será”. LORENZA ABIMAÑAY. Lola García, octubre 2022.
María Luisa Gómez de la Torre
María Luisa Gómez de la Torre Páez (Quito, 28 de mayo de 1887-1976) fue una educadora, feminista y activista ecuatoriana pionera en el campo de la lucha por los derechos de los indígenas y campesinos en su país. Fue la primera mujer en ejercer como profesora dentro de un colegio para varones en la ciudad de Quito.
“Hija de Joaquín Gómez de la Torre Álvarez y Francisca Páez Rodríguez, en 1944 participó en la creación de la primera organización indígena en Ecuador que se denominó Federación Ecuatoriana de Indios (FEI); por otro lado, colaboró activamente con la indigenista Dolores Cacuango Quilo en la fundación de diversas escuelas bilingües (quechua-español) destinadas a la alfabetización de la población campesina y de origen indígena.
En el ámbito político, es considerada como una de las precursoras del movimiento izquierdista de su país junto a las guayaquileñas Aurora López, Isabel Herrera, Ana Moreno, y las quiteñas Nela Martínez y Laura Almeida; en este contexto, participó en 1926 de la fundación del Partido Socialista del Ecuador. En 1930, formó el Club de Profesores del Mejía; en 1937, junto a otros colegas, fundó el Sindicato de Profesores del Mejía que posteriormente —en 1946—se transformó en la Unión Nacional de Educadores.
Como activista feminista, fue parte de las fundadoras de la Alianza Femenina Ecuatoriana en 1938. Además, fue una de las fundadoras de la Alianza Femenina Ecuatoriana y de Mujeres del Ecuador”. Wikipedia.
Laura Almeida
Nació en Quito el 25 de abril de 1925, y su legado sigue siendo una inspiración.
Fue maestra, escritora y pionera en la política ecuatoriana.
En los años 60, rompió barreras al convertirse en la primera mujer en liderar un partido político (PSRE).
Su valentía y compromiso dejaron huella en la historia de las mujeres y la política.
Militó en el Partido socialista desde su candorosa juventud, pasando por un largo historial de lucha en las filas de la FEUE, la AFU y el partido obrero, siendo contestaría y rebelde inclusive en la época de la dictadura, por lo que la persecución y la represión estuvieron a la orden del día.
El legado documental que dejó al partido Socialista ecuatoriano son una fuente valiosa de estudio de la militancia y su dogma, con discursos llenos de fragor insurgente se refirió a como el sistema cambia a los más acérrimos socialistas, quienes apagada la llama de la juventud se sometían como mansos corderos a un sistema injusto del cual tanto denostaron.
Impulsó la lucha armada insurrecta sin medias tintas, no dudo en desprenderse de sus bienes personales por financiar las causas, fue una cara visible en el combate de la discriminación de género muy acentuada en aquella época, conformó el Frente de Mujeres Socialistas para contrarrestar esta injusta discriminación. LAURA ALMEIDA. Revista Opción S.
Rosalía Arteaga

Foto: popmovement
Ecuatoriana, primera mujer Presidenta y Vicepresidenta Constitucional de la República del Ecuador. Fue viceministra de Cultura y ministra de Educación. Cultura y Deportes.
Actualmente, es presidenta ejecutiva de Fundación FIDAL; miembro de la Academia Mundial de Artes y Ciencias; se desempeña como miembro del Consejo Directivo de la Biblioteca de Alejandría en Egipto; es miembro de honor de la Real Academia de Doctores de Europa y Alta Comisionada de la Panamazonia de Manaos, Brasil.
Es también asesora en educación de la Asociación Comercial China – Norteamericana de California; miembro del Consejo de Regencia de la Universidad de Otavalo y de la Universidad SEK del Ecuador y presidenta del Consejo Social Asesor de la Fundación CoFuturo; miembro del Comité Asesor Externo del Instituto Estudios Avanzados de las Américas de la Universidad de Miami; miembro del Atlantis Group ; miembro del Patronato del WSDF, World Sustainable Development Forum; miembro de la Junta Consultora de la Universidad Católica de Nueva España y de UBBIQUO Global Business School; presidenta honoraria de International Women´s Club IWC.
Es profesora honoraria de la Universidad de Fujian – China, de la Universidad de Tarapoto y de la Universidad Católica de Cuenca. Adicionalmente, es Doctora Honoris Causa de la Universidad Internacional de California, Compañera Distinguida de la Sociedad Americana de Ciencias Diplomáticas y Políticas, Académica Numeraria de la Academia Internacional de Ciencias Sociales IASS, de Palm Beach.
Ha publicado 15 libros de ensayo, prosa poética, poesía, cuentos, literatura infantil y juvenil. Sus poemas han sido parte de varias antologías en el Ecuador y en otros países.
Dicta conferencias, promueve la educación y el cuidado del medio ambiente, colabora para algunos medios de comunicación y publicaciones nacionales e internacionales. Mantiene espacios de opinión en medios escritos y audiovisuales. ROSALÍA ARTEAGA. Fundación Fidal.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
- Estrada, Jenny, MATILDE HIDALGO DE PROCEL. Una Mujer Total.
- Fundación Fidal, Rosalía Arteaga
- García, Lola, LORENZA ABIMAÑAY, octubre 2022
- García, Lola, MANUELA ESPEJO, octubre 2022
- Revista Opción S., LAURA ALMEIDA.
- Rivadeneira Játiva, Luis, Reina Pacha Duchicela, Quincentenario de la muerte de la Reina Pacha, Mundial Medios, Artículo 2025.
- Velasco, Juan de, Historia del Reino de Quito, Pacha.
- Wikipedia.