Todo lo que necesitas saber de la gran Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático 2022, la COP27
Noticias ONU. La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de este año se lleva a cabo en Sharm el-Sheikh, en un contexto de fenómenos climáticos extremos por doquier, una crisis energética provocada por la guerra en Ucrania y datos científicos que reiteran que el mundo no está haciendo lo suficiente para reducir las emisiones de carbono y proteger el futuro de nuestro planeta.
El Secretario General, António Guterres, ha dicho que esta Conferencia, la COP27 por ser la número 27 desde que comenzó la serie, debe ser capaz de dar soluciones que estén a la del problema. La pregunta es ¿cumplirán los líderes?
Durante las próximas semanas, Noticias ONU informará puntualmente de todos lo que suceda en la Conferencia, que comenzará oficialmente el 6 de noviembre. Pero antes de que nuestro equipo multimedia se dirija a la costa del Mar Rojo, hemos compilado esta guía con algunas de las cuestiones más importantes que necesita saber.
¿Por qué tantas Conferencias?
Las Conferencias sobre el Cambio Climático se encuentra entre las conferencias anuales relacionadas con el clima más grandes e importantes del planeta.
En 1992, la ONU organizó la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro, Brasil, en la que se adoptó la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y se estableció su agencia coordinadora, que ahora conocemos como la Secretaría sobre el Cambio Climático de la ONU.
En este tratado, las naciones acordaron «estabilizar las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atmósfera para evitar interferencias peligrosas de la actividad humana en el sistema climático». Hasta el momento, 197 naciones y entidades lo han firmado.
Desde 1994, cuando el tratado entró en vigor, la ONU ha estado reuniendo anualmente a casi todos los países del mundo en esta cumbres climáticas, conocidas en el mundo diplomático como COPs, que significa «Conferencia de las Partes».
Durante estas reuniones, las naciones han negociado varias extensiones del tratado original para establecer límites legalmente vinculantes a las emisiones, por ejemplo, el Protocolo de Kioto en 1997 y el Acuerdo de París adoptado en 2015, en el que todos los países del mundo acordaron redoblar los esfuerzos para intentar limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados por encima de las temperaturas preindustriales.
También han tratado de impulsar la financiación de lo que se denomina la acción climática, es decir el conjunto de medidas para hacer frente al cambio climático.
Este año marca la 27ª cumbre anual, o COP27.
¿Cómo se diferencia esta Conferencia de las anteriores?
La COP26 del año pasado, en la que se cumplieron cinco años desde la firma del Acuerdo de París (se saltó un año por la pandemia de COVID), culminó con el Pacto Climático de Glasgow, el cual mantuvo aún vivo el objetivo de frenar el calentamiento global a 1,5 grados, pero “con un pulso débil”, como declaró la entonces presidencia del Reino Unido.
No obstante, hubo avances para hacer que el Acuerdo de París sea completamente operativo, ya que se finalizaron los detalles para su implementación práctica, a través del Libro de Reglas de París.
En la COP26, los países también acordaron asumir compromisos más sólidos este año, incluidos planes nacionales actualizados con objetivos más ambiciosos. Sin embargo, solo 23 de 193 países han presentado sus planes a la ONU hasta ahora.
En Glasgow, también se hicieron muchas promesas dentro y fuera de las salas de negociación con respecto a los compromisos de cero emisiones netas de carbono, la protección de los bosques y la financiación climática, entre muchos otros temas problemáticos.
De acuerdo con la declaración de la visión presidencial, COP27 consistirá en pasar de las negociaciones a la «planificación para la implementación» de todas estas promesas y compromisos realizados.
Egipto ha pedido una acción completa, oportuna, inclusiva y a gran escala sobre el terreno.
Según los expertos, además de revisar cómo implementar el Libro de Reglas de París, la conferencia también verá negociaciones sobre algunos puntos que quedaron inconclusos después de Glasgow.
Estos temas incluyen el financiamiento de “pérdidas y daños” para que los países en la primera línea de la crisis puedan hacer frente a las consecuencias del cambio climático, que va más allá de lo que pueden adaptarse a este.
También incluye el cumplimiento de la promesa de los países desarrollados de destinar100.000 millones de dólares cada año al financiamiento para la adaptación de los países con menores ingresos.
Las negociaciones también incluirán discusiones técnicas, por ejemplo, para especificar la forma en que las naciones deben medir prácticamente sus emisiones para que haya igualdad de condiciones para todos.
Todas estas discusiones allanaran el camino para el primer Inventario Global en COP28, que en 2023 evaluará el progreso colectivo global en mitigación del impacto del cambio climático, la adaptación a este y los medios de implementación del Acuerdo de París.
¿Cuáles son los mayores objetivos de esta Conferencia?
Mitigación: La Mitigación del Cambio Climático se refiere a los esfuerzos para reducir o prevenir la emisión de gases de efecto invernadero. La mitigación puede significar el uso de nuevas tecnologías y fuentes de energía renovables, hacer que los equipos más antiguos sean más eficientes desde el punto de vista energético o cambiar las prácticas de gestión o el comportamiento de los consumidores.
Se espera que los países muestren cómo planean implementar la convocatoria del pacto de Glasgow, revisar sus planes climáticos y crear un programa de trabajo relacionado con la mitigación.
Esto significa presentar objetivos de emisiones más ambiciosos para 2030, ya que ONU Cambio Climático ha declarado que los planes actuales aún no son suficientes para evitar un calentamiento catastrófico.
Adaptación: El cambio climático está aquí. Más allá de hacer todo lo posible para reducir las emisiones y reducir el ritmo del calentamiento global, los países también deben adaptarse a las consecuencias climáticas para poder proteger a sus ciudadanos.
Las consecuencias varían dependiendo de la ubicación. En unos lugares, podría significar el riesgo de más incendios o inundaciones, en otros de sequías o días más cálidos o más fríos, y en otros un aumento del nivel del mar.
En la COP26, los delegados adoptaron un programa de trabajo sobre la meta global de adaptación establecida en el Acuerdo de París.
El plan se puso en marcha para equipar a las comunidades y los países con el conocimiento y las herramientas para garantizar que las acciones de adaptación que toman realmente están moviendo al mundo hacia un futuro más resistente al clima.
La Presidencia de COP27 espera que las naciones capturen y evalúen su progreso para mejorar la resiliencia y ayudar a las comunidades más vulnerables. Esto significa que los países asuman compromisos más detallados y ambiciosos en los componentes de adaptación de sus planes climáticos nacionales.
El año pasado, los países desarrollados acordaron al menos duplicar el financiamiento para la adaptación, y muchas partes interesadas están pidiendo niveles aún mayores de financiamiento para la adaptación para igualar los montos que ahora se gastan en mitigación, según lo establecido en el Acuerdo de París. Este definitivamente será un gran tema de conversación en Sharm el-Sheikh.
La Secretaría sobre el Cambio Climático de la ONU tiene claro que para responder a los riesgos climáticos presentes y futuros es necesario aumentar significativamente la escala de financiera para la adaptación, de todas las fuentes, públicas y privadas. Todos los integrantes deben participar: gobiernos, instituciones financieros y el sector privado.
Finanzas climáticas: Las finanzas climáticas volverán a ser un tema principal en la COP27, muchas discusiones relacionadas con las finanzas ya están en la agenda, y los países en desarrollo hacen un fuerte llamado a los países desarrollados para asegurar un apoyo financiero suficiente y adecuado, particularmente para los más vulnerables.
Probablemente se escuchará mucho sobre los famosos 100.000 millones de dólares, la promesa anual que las naciones desarrolladas no están cumpliendo. En 2009 en Copenhague, los países ricos se comprometieron con este financiamiento, pero los informes oficiales todavía muestran que no se está alcanzando este objetivo. Los expertos esperan que la COP27 haga realidad este compromiso finalmente para 2023.
La Presidencia egipcia espera dar seguimiento a este y otros compromisos y promesas realizadas en COP anteriores.
¿Qué significa realmente el problema de las pérdidas y los daños ?
El cambio climático, a través de fenómenos meteorológicos extremos como los ciclones tropicales, la desertificación y el aumento del nivel del mar, causa daños costosos a los países.
Debido a que la intensificación de estos “desastres naturales” está siendo causada por el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, principalmente de los países ricos industrializados, los países en desarrollo, a menudo los más afectados, argumentan que deberían recibir una compensación.
Dinamarca fue noticia durante la última semana de alto nivel de la Asamblea General de la ONU después de ser el primer país en anunciar que donará 13.000 millones de dólares a los países en desarrollo que han sufrido daños debido al cambio climático.
El tema de estos pagos, conocido como “pérdidas y daños”, será probablemente un gran tema de discusión en COP27, incluso cuando aún no se haya incluido todavía oficialmente en la agenda.
El grupo de países conocido como el G77 más China (que incluye esencialmente a todas las naciones en desarrollo) solicitó agregarlo a la agenda de la Conferencia, lo que requerirá el consenso de todos los países el primer día de las conversaciones.
Hasta la fecha, ha habido discusiones sobre el establecimiento de un fondo de Pérdidas y Daños, pero nada concreto. Expertos como el relator especial de la ONU sobre derechos humanos y clima, Ian Fry, esperan generar un mayor impulso y ponerlo en marcha.
“Hay grandes países desarrollados que están bastante preocupados por eso y miran este tema desde la perspectiva de lo quien contamina, paga. Ahora, los países más afectados por el cambio climático y que sufren los costos tienen que lidiar con esos costos ellos mismos. Es hora de que los grandes países, los principales emisores, se pongan de pie y digan: ‘Tenemos que hacer algo, tenemos que hacer una contribución a estos países vulnerables’”, dijo Frey en una reciente entrevista con ONU Noticias.
¿Cómo está afectando a todo esto la guerra en Ucrania?
De acuerdo con Ilana Seed, embajadora de Palau ante las Naciones Unidas y negociadora en la Conferencia, la COP27 va a ser “confusa” dado el panorama sociopolítico actual y la crisis energética.
“Debido a la guerra en Ucrania, muchas cosas que muchos países acordaron no las pueden hacer ahora. Como resultado de la guerra, el panorama ha cambiado”, explicó.
De hecho, la invasión de Rusia a Ucrania ha provocado una crisis mundial de inflación, energía, alimentos y cadena de suministro. Países como Alemania han tenido que reducir sus objetivos climáticos a corto plazo, mientras que el histórico Grupo de Trabajo Climático China-Estados Unidos anunciado en Glasgow ahora ha sido suspendido.
Lo más probable es que en COP27 se vea un revés en las promesas y compromisos que algunos países hicieron el año pasado.
Sin embargo, el relator especial Ian Fry considera que la guerra también podría ser una “llamada de atención” para que las naciones se vuelvan autosuficientes en energía.
Argumenta que la forma más barata de hacerlo es a través de las energías renovables, que son clave para reducir las emisiones.
“Estamos viendo que Portugal avanza hacia tener un 100% de su energía a través de fuentes renovables, sabemos que Dinamarca también lo está haciendo, y creo que eso impulsará a otros países a ver la necesidad de ser renovables y autosuficientes en energía”, mencionó a Noticias ONU.
¿Participará la sociedad civil en la COP27 o solo los delegados?
El evento principal se llevará a cabo en el Centro Internacional de Convenciones de Sharm el-Sheikh, del 6 al 18 de Noviembre.
Hasta el momento, hay más de 30.000 personas registradas para asistir en representación de gobiernos, empresas, ONG y grupos de la sociedad civil.
Las 197 Partes del tratado de la citada Convención, a menudo se reúnen en grupos o «bloques» para negociar juntos, como el G77 más China, el Grupo Africano, los Países Menos Adelantados, el Foro Paraguas, los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo y la Alianza Independiente de América Latina y el Caribe.
Las negociaciones también incluyen observadores, que no tienen parte formal en ellas, pero intervienen y ayudan a mantener la transparencia. Los observadores incluyen agencias de las Naciones Unidas, organizaciones intergubernamentales, ONG, grupos religiosos y la prensa.
Pero además de las negociaciones oficiales, habrá salas de conferencias, una sección de pabellón y miles de eventos paralelos, divididos en días temáticos,
Los temas previstos este año son: Finanzas, Ciencia, Juventud y Generaciones Futuras, Descarbonización, Adaptación y Agricultura, Género, Agua, [LGG1] Sociedad Civil, Energía, y Biodiversidad y Soluciones, el asunto más nuevo de estas Conferencias.
Como de costumbre, la conferencia tendrá lugar en dos zonas: la Zona Azul y la Zona Verde, que este año están ubicadas una frente a la otra.
La Zona Azul es un espacio administrado por la ONU donde se realizan las negociaciones, y para ingresar, todos los asistentes deben ser acreditados por la Secretaría de la Convención.
Este año habrá 156 pabellones dentro de la Zona Azul, el doble que en Glasgow. Muchas agencias de la ONU, países y regiones estarán representados, y también habrá por primera vez una pabellón de los Jóvenes y otro Agroalimentario.
La Zona Verde está gestionada por el Gobierno egipcio y está abierta al público registrado. Incluirá eventos, exposiciones, talleres y charlas para promover el diálogo, la sensibilización, la educación y el compromiso con la acción climática.
De acuerdo con la Presidencia, la Zona Verde será la plataforma donde la comunidad empresarial, la juventud, las sociedades civiles e indígenas, la academia, los artistas y las comunidades de la moda de todo el mundo puedan expresarse y hacer escuchar sus voces.
Este año, la Zona Verde también incluirá una «zona de protesta» especial y un gran salón al aire libre y una terraza.
Tomado de Noticias ONU – Foto: Noticias ONU