Mis vecis camaleones
Por: Walter Burbano Iglesias
wburbanoiglesias@yahoo.es
Por Redes se ha difundido una alegoría verbal contra una mujer que no se sabe la motivación intrínseca que le causó cuando un vendedor le llamó veci y su respuesta de proclamarse no ser India.
No me causa ninguna novedad las actitudes de los vecis y el silencio temporal de los No vecis
Los primeros por dos razones: el desconocimiento de una crónica realidad sociológica política y los segundos por lo mismo o conociendo las razones pretenden adular a los vecis, hacerse conocer que son vecis para alcanzar simpatías políticas
Esta intrascendente proclama de ser o no ser veci, sentirse indio o no ser indio encierra la realidad sociológica política y económica nacional que a diferencia del secular desarrollo evolutivo de los pueblos en este País se ha estancado y en algunas esferas se ha retrocedido.
Para nadie medianamente informado es desconocido que la falta de identidad nacional de Estado es un sentimiento crónico y que el serrano es serrano, el mono es mono y es vivísimo, el de un pueblo, comuna, parroquia o barrio es mejor que el otro, mi colegio es “superior” a ese, antes era que el chagra es chagra el citadino es citadino, el indio ya no es indio es indígena (como que no fuera lo mismo) y el mestizo de odiador ha pasado a ser odiado por el Indio.
No se ha avanzado en el desarrollo nacional por la baja cultura educativa y política además de la demagogia y el interés político caudillista que en un desmedido afán de poder local no solo se ha legislado sino que también se ha educado en dibujar en un estado tan pequeño como el Ecuador en pequeños mini estados y feudos.
Los políticos sintiéndose pequeños monarcas hasta en los discursos del presidente de la junta parroquial, alcaldías o prefecturas hablan de “Mi Gobierno”, en “Mi Territorio”, replicando la verborrea los agradecidos llamados comunicadores.
Históricamente la política y los políticos en el afán de llegar al poder como sea reemplazaron siempre el discurso político serio y práctico por el discurso y la praxis del adulo
Los vecis de la educación pasada y presente tienen enorme responsabilidad en la división entre vecis y no vecis por lo que desde hace un tiempo a esta parte imperan los modismos en el servicio al cliente cuando los proveedores o sus ayudantes han venido imponiendo un trato al consumidor sea quien sea, recuerdo que antes era “que desea joven”, luego “que desea mija”, hoy la moda es “que desea veci”
Me agradaría ver la cara de mis vecis cuando a su madre de 80 años un adolescente de 15 años le diga “que desea mija”.
Por lo tanto dejémonos de pavadas vecis los gustos o disgustos de los vecis no es más que el desfogue de una cruel realidad que está lejos de dejar atrás el atraso y subdesarrollo del cual no logramos salir.