“Lasso nunca más”, fue el grito que despidió a Guillermo Lasso, en la Asamblea

En esta ocasión, el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Kronfle, no salió a recibir a Lasso, como lo determina el protocolo; esa formalidad se la dejó a la escolta legislativa.

Con diez minutos de retraso, llegó el expresidente de la República, Guillermo Lasso, a la Asamblea Nacional, donde se llevó a cabo la ceremonia de posesión del ahora mandatario electo Daniel Noboa.

Sin bastón, tembloroso, con un caminar lento, tomado de la mano de su esposa, María de Lourdes Alcívar y del otro lado agarrándose del brazo de su edecán para evitar caerse, Lasso cruzó la alfombra roja, hasta el segundo acceso al Legislativo.

En esta ocasión, el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Kronfle, no salió a recibir a Lasso, como lo determina el protocolo. Esa formalidad se la dejó a la escolta legislativa y prefirió quedarse en el podio del Parlamento, junto al presidente electo, Daniel Noboa, y a otras autoridades nacionales e internacionales, que sí llegaron puntuales.

Guillermo Lasso recibió los honores de rigor y escuchó el himno nacional, mostrando un rostro visiblemente golpeado, mientras María de Lourdes Alcívar le apretaba la mano e intentaba sonreír.

Su esposa solo lo pudo acompañar hasta la primera fila de asientos colocados para invitados, de ahí en más, a Lasso le tocó desenvolverse solo.

En la tarima, Guillermo Lasso fue recibido por la vicepresidenta electa, Verónica Abad, quien le acarició el brazo con su mano derecha, como tratando de consolarlo, posteriormente el expresidente se acercó con una media sonrisa donde su sucesor, Daniel Noboa, y le dio la mano, lo mismo hizo con Henry Kronfle, a quien evitó mirar a los ojos, colocando su vista hacia el suelo.

En ese momento, la segunda vicepresidenta de la Asamblea Nacional, Viviana Veloz, prefirió quedarse sentada y no saludó a Lasso.

Ya en el podio, los asistentes le gritaron: !!Que se largue¡¡

Posteriormente se colocó en su lugar y se vio obligado a escuchar el discurso de Henry Kronfle, a quien, un día antes, Guillermo Lasso, le dijo que su único mérito es ser nieto de un caballero que trabajó mucho y se convirtió en rico.

“El valor de la palabra se debe recuperar. El debate debe realizarse con altura y argumentos y no con insultos y descalificaciones”, fue una de las perlas que lanzó Henry Kronfle, en su intervención. El debía ser elegido Presidente de la Asamblea en el 2021, tras un acuerdo entre el PSC, CREO y la RC, pero Lasso lo rompió.

En la toma de juramento de Kronfle al presidente de la República, Daniel Noboa, Guillermo Lasso, se colocó en el medio y lo miró de reojo, para al final tomarse lo que fue la penúltima foto protocolar.

A Lasso nadie le ayudó a quitarse la banda presidencial, lo hizo sólo, como sacándose una camiseta de manera apresurada. Se la entregó a una mujer, quien se lo pasó a otra persona y finalmente no se supo a dónde fue a parar este símbolo  que representa los más de dos años de su mandato.

Con una media sonrisa, Guillermo Lasso vio a Henry Kronfle colocar la banda presidencial a Daniel Noboa y finalmente se puso a un costado del mandatario electo y se tomó la última foto protocolar.

A su salida del Pleno se escucharon los gritos de “Lasso nunca más” y “Fuera Lasso”, fue ahí cuando el equipo técnico de la Asamblea Nacional, único ente autorizado para la transmisión de la ceremonia, al interior del Pleno, decidió silenciar el video y poner una canción de fondo.

En el último tramo de la alfombra roja, ya como un ciudadano común, una vez más, Guillermo Lasso salió acompañado de su esposa y edecán, tratando de agarrar su brazo para no caerse, mientras bajaba las últimas gradas del edificio del Legislativo. Así ingresó a su vehículo, sin haber terminado su período, usando la muerte cruzada para evitar el juicio político.

Tomado de Pichincha Comunicaciones – Foto: Pichincha Comunicaciones